viernes, 27 de julio de 2012

UN DÍA QUE EMPIEZA LLUVIOSO Y AL FINAL BRILLA EL SOL

Hola a tod@s:
Llevo algunos días algo desaparecida del mundo virtual, pero no penséis que he estado inactiva, sino todo lo contrario he estado bastante activa.
En la entrada de Mayo os contaba que había hecho una almohada corazón para mi hermana para que se llevara la hospital cuando la operaran y así fue como empezó esta historia que hoy os voy a contar.
Cuando la enfermera encargada de informar y curar a las pacientes operadas de cáncer de mama la vio con su almohada le preguntó que era eso y le pidió que la dejara hacerle una foto, en ese mismo instante llegó el cirujano y le comentó lo que mi hermana le había contado sobre la almohada corazón le preguntaron por el coste y ella les dijo que eran gratuitas y que se regalaban a las pacientes mastectomizadas para aliviar las molestias de la operación. Le preguntaron si podíamos hacer más para las pacientes de Elche ya que ellos no sabían de su existencia.
Yo ya había hablado con mis amigas  para dedicar un par de tardes a la semana para reunirnos y hacer un grupo de voluntarias y lo llamaríamos " la tarde del corazón".
Cuando leí la historia de como empezó todo me quedé muy sorprendida y me gustaría que vosotr@s la conocierais también.....
Sus orígenes se sitúan en el HOSPITAL ERLANGER MEDICAL CENTER de Chattanooga en Tennessee (Estados Unidos) donde la enfermera del servicio de oncología JANET KRAMER-MAI tuvo que ser operada en 2001.
Después de la operación, tres de sus tías cosieron y le colocaron una almohada que se ajustaba confortablemente debajo del brazo; no solamente le reducía de forma sensible el dolor de la incisión al no presionar el edema sino que la protegía de contactos o golpes accidentales y disminuía la tensión de los músculos del hombro, evitando así gran parte del sufrimiento de este tipo de post-operatorio. Después de su recuperación Janet lo introdujo en su servicio del hospital.
A raíz de asistir a un congreso en Estados Unidos, Nancy Friis Jensen conoció a Janet que le presentó su proyecto de la almohada, entregándole una bolsita que contenía: una bata quirúrgica muy suave diseñada especialmente para las pacientes, folletos, direcciones de servicios de ayuda a las pacientes y una almohada del corazón. Este pack era entregado a cada una de las pacientes del hospital de Janet, y esas almohadas eran cosidas por voluntarias de varias iglesias y diferentes agrupaciones femeninas que entregaban al hospital o clínica para las mujeres recién operadas de cirugía mamaria.
Nancy inmediatamente aplicó la idea en su centro de trabajo en Dinamarca y poco a poco fue encontrando ayuda de todo tipo por parte de voluntarios y colaboraciones de todo el país, distribuyendo la almohada en diferentes hospitales de Dinamarca y otros países de Europa.
La Almohada del Corazón permite a los pacientes y familiares no solo paliar el dolor del postoperatorio, sino a llegar a otras mujeres demostrándoles con este regalo que no se encuentran solas y que otras mujeres, aunque no las conozcan, piensan en sus necesidades.
Actualmente Nancy y su grupo ya cubre TODOS y cada uno de los LOS HOSPITALES DE DINAMARCA. Este proyecto ha comenzado también en Alemania, Francia, Grecia, Inglaterra, Irlanda, Suecia, Noruega, Canadá, Bélgica, China, Australia y Méjico. 






La Sra. María José LOLY DE COOMAN (Micky), fundadora de la Asociación de Cosipatchwork que divulga el Patchwork en Baleares, contactó con Nancy Friis en Dinamarca para pedir su ayuda y llevar esta idea a España. Nancy le dio su acuerdo y ha iniciado su difusión y organización en Baleares, con la firme intención de extenderlo a todos los hospitales de las islas.
Hasta el día de hoy han entregado 118 almohadas del corazón en hospitales de Mallorca. La foto muestra un grupo de mujeres de la Iglesia de los Santos de los Últimos Días (Mormones) en Mallorca. También hay un grupo de alumnas de Cosipatchwork en Palma de Mallorca  que están trabajando en este proyecto.

Me puse en contacto con MICKY  para informarme de como funcionaba todo eso y además le conté mi pequeña historia, de lo que mi hermana estaba pasando y como yo me había decidido a ayudarla de la mejor manera posible para hacer más llevadero estos momentos, ella enseguida me contestó y me escribió un correo de lo más emotivo, a la mañana siguiente ví en  su blog  un post dedicado a mí yo le dije a Micky que habíamos pensado en hacer unos brochecitos para vender y de esta manera sacar el coste de la almohada corazón (ya que se regala) y así fue como empezó todo.
Le pedí a mi cuñada Irene que si me ayudaba a vender corazoncitos en la peluquería donde ella trabaja y se llevó unos poquitos para probar,le comenté que quería hacer un cartelito para ponerlo junto a los corazones, pero como estaba en la playa allí no tenía ordenador y me era imposible hacerlo así que ella creó un cartelito con un slogan¡¡¡ genial!!! y cual fue mi sorpresa cuando a la mañana siguiente me estaba pidiendo más por que los había vendido todos y ahora se los tengo que mandar cada dos días por que todas las mujeres quieren colaborar y hay una clienta que se los lleva de 25 en 25 ( así da gusto iniciar un proyecto con gente  tan solidaria). 
Gracias Irene por poner tu granito de arena en esta iniciativa
UY!!! os enseño el cartelito que he retocado yo un poco en casa para llevarlo al hospital.
Como ahora mis hijas están de vacaciones algunas tardes las dedicamos a coser un poquito....
Mel hace los broches, Lara las almohadas corazón y yo un poco de todo jajajaja.
  
Aquí estamos las tres mujeres de mi casa en una" mini tarde del corazón"
A mi hija mayor al principio le costaba un poquito pero ahora se hace varios en una tarde....
Estos son los broches que vendemos a 1 € y que nos ayuda a realizar las almohadas corazón que les damos a la pacientes.
Ayer volvieron a operar a mi hermana y cuando entrabamos a la habitación la enfermera nos dijo que había una paciente que le había pedido una almohada corazón, llamamos a mi sobrina para que nos trajera una por la tarde y yo me fui a entregársela, me preguntó que valía y yo le expliqué que se daban gratuitamente a las pacientes, que ellas ya tenían suficiente con lo que les ocurría como para cobrarles por eso,entonces le conté como las " financiábamos" y me dijo que le trajera dos broches. 
Creo que nunca olvidaré la cara de esa chica cuando se puso la almohada pero lo que si que no podré olvidar es cuando por la tarde me iba del hospital me la encontré en el pasillo y me dijo:- ¿te puedo dar un beso en agradecimiento a la ayuda que me has dado, desde que llevo la almohada puesta me duele mucho menos la herida y sobre todo el brazo y el hombro? 
Me acerqué para besarla y le dije que ese corazón estaba relleno de todo nuestro amor para mujeres como ella.
"Así es como terminó un día que había empezado lluvioso y al final brilló el sol"


LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...